La inteligencia artificial se define, por paralelismo, como la nueva electricidad. Hoy todo funciona con luz y en un futuro todo funcionará con inteligencia artificial. De hecho, algunos objetos inteligentes y conectados ya lo hacen. Por ejemplo, los televisores 8K que son capaces de corregir imágenes en tiempo real, incluso de baja calidad, y hacerlas pasar por una calidad a 4320 píxeles.
Este remasterizado con IA ha sido investigado por varias marcas a lo largo de los últimos años y conseguido de forma estable solo por un puñado de televisores como los QLED 8K de Samsung. Pero la aplicación de la inteligencia artificial en los televisores no se queda solo en mejorar la imagen. Recomendación de contenido, asistentes de voz, edge enhancement e incluso series ad hoc para audiencias determinadas usando machine learning.
Cuando tu televisor te recomienda lo que ver

Ya hay firmas, como Epagogix, que se dedican a analizar guiones de cine con técnicas de machine learning con el objetivo de ver qué triunfará en taquilla. Mientras tanto, en nuestros televisores Samsung QLED tenemos otro asistente encargado de ayudarnos a filtrar contenido. ¿Alguna vez has pasado más tiempo eligiendo película que cenando?
La culpa es de la Ley de Hick: cuantas más opciones disponibles tenemos, más tiempo tardaremos analizando cuál es la mejor. Y es exponencial. Si hay que elegir entre la película A y B, solo tendremos que comparar A con B. Pero, ¿y si tengo tres películas propuestas? (A con B, B con C, C con A). ¿Y cuatro? Ahora habré de comparar A con B, A con C, A con D, B con C, B con D y C con D…
No solo lleva más tiempo elegir. También nos sentimos menos satisfechos y más inseguros al elegir. Más probabilidades de pensar que nos hemos equivocado. De esto se dio cuenta Barry Schwartz y lo llamó paradoja de la elección.
Por eso plataformas como Netflix, HBO, Prime Video pero también Google Maps o Amazon usan la inteligencia artificial para filtrar miles de ítems y ofrecernos unos pocos. En el caso de Netflix y Google Maps hacen uso del factor de afinidad; y suelen acertar gracias a técnicas de inteligencia artificial.
Hoy, para hacernos la vida más fácil, también tenemos a Bixby, el asistente virtual de Samsung (abajo) que nos ayudará no solo a encontrar películas según nuestros gustos sino también a organizar la agenda, buscar compras, establecer una ruta, solicitar una receta de cocina si vamos justos de tiempo, etc.
Si hablamos únicamente de televisores QLED, Bixby se convierte en un apoyo más que interesante. Nos permitirá cambiar de canal, controlar el brillo de los hasta 5000 nits que ofrecen estas pantallas e, incluso, controlar la imagen con Ambient Mode, la aplicación de las pantallas QLED que hace que el televisor sea capaz de camuflarse con el diseño de la pared. La inteligencia artificial está llegando a los televisores desde todos los ángulos.
¿Qué es el remasterizado de imágenes?
Una pantalla 4K se genera colocando cuatro pantallas de 1080 píxeles formando un rectángulo. Si repetimos la operación y volvemos a cuadruplicar la pantalla llegamos a horizontales de 4320p y, por tanto, al 8K. Pese a la enorme diferencia de calidad, ¿qué ocurre si vemos una película 2K en un televisor Samsung QLED 8K? ¿La veré pequeñita? ¿Pixelada? La respuesta es no, pero vayamos por partes.
El remasterizado de imágenes, presente desde hace años en los televisores, permite la recepción de señal de calidad inferior a la pantalla. Si, por ejemplo, una pantalla de 1080p recibe una señal de 720p lo que hace es estirar la imagen para hacer que coincida en el ancho de pantalla. Y, claro, esto a veces da problemas.
Pasar de 720p a 1080p implica que tres píxeles tienen que convertirse en cuatro; y los píxeles son unidades de medida mínimas. Cada píxel tiene que convertirse en 1,33 píxeles, lo que da lugar a errores de imagen. Hace que en ocasiones el remasterizado no quede todo lo bien que podría. Así era hasta que entró la inteligencia artificial en la ecuación.

En los televisores QLED 8K podemos ver en acción cómo la tecnología AI Upscaling, exclusiva de Samsung, evita estos problemas tratando la señal de vídeo de forma dedicada y en tiempo real. Formalmente, y en lenguaje audiovisual, renderizando la emisión.
Esto implica que el espectador puede ver una película antigua sin preocuparse de que el remasterizado haga de las suyas gracias a la inteligencia artificial y al cerebro del televisor. Todo esto porque el televisor piensa. Es más, la película se verá en 8K, mejor de lo que fue grabada en origen, gracias a técnicas de renderizado IA como las que mostramos abajo. Pero, antes, ¿y si las IAs nos ayudasen a crear series?
La serie que se diseñó usando inteligencia artificial
‘House of cards’ (2013 – actualidad) es probablemente una de las series más taquilleras de Netflix. Unos años antes de su lanzamiento, Netflix entraba en la guerra de la creación de contenido y no querían luchar contra Hollywood atados de manos. Por ello, en lugar de contratar expertos en cine levantaron un equipo experto en datos y analizaron las tendencias que maximizaran el visionado.
Como resultado de aplicar inteligencia artificial a los datos de los usuarios aparecieron tres datos destacables como factores clave:
- Kevin Spacey como actor,
- David Fincher como director,
- y dramas políticos producidos por la BBC como argumento.
Una vez tenían estos ingredientes, solo había que mezclarlos bien. Fue la primera serie web en ganar un Emmy, tuvo nueve nominaciones, y ninguna otra serie web ha logrado su éxito (de momento). Sin duda sentó un precedente que veremos con más frecuencia en los próximos años. Volvamos ahora a la imagen.
Edge Enhancement: la IA define la imagen
Uno de los problemas más frecuentes en el remasterizado es el pixelado o falta de definición. Es lo que ocurre cuando hacemos zoom en una fotografía. Pronto aparecen píxeles, dentados en los contornos, y la imagen pierde calidad. Sin embargo, los televisores QLED incluyen como parte de su corrección mediante inteligencia artificial la tecnología Edge Enhancement.

Esta tecnología se apoya, a su vez, en tres módulos que mejoran la imagen: creación en detalle (detail creation), para agregar definición; restauración de límites (edge restoration), para consolidar textos y zonas borrosas; y reducción de ruido (noise reduction), que trabaja para eliminar el ruido de las imágenes.
Todo esto ocurre en fracciones de segundo, y sin lag que ralentice la imagen. Y es que la tecnología 8K de Samsung está cambiando la forma en que visualizamos el contenido, de la mano de la inteligencia artificial. Ya no hace falta recibir una señal 8K en streaming para poder disfrutar de este formato en casa, gracias a televisores capaces, en cierto modo, de pensar.
Imágenes | iStock/rez-art, Samsung Newsroom, Samsung 8K AI Technology